Os presentamos a José María Valpuesta Ruiz. Es director general Colegio La Salle Felipe Benito de Sevilla.

1.- ¿Cuéntanos alguna vivencia o experiencia que espiritualmente te haya marcado?

Sin duda la experiencia que más me ha marcado es la que tuve en mis primeros años de caminar en La Salle. En un mes de septiembre de un nuevo curso, se incorpora a nuestra comunidad educativa una alumna nueva, de necesidades educativas especiales. Desde la primera interacción con ella fue toda una vivencia…en primer lugar reconozco que fue un desafío pedagógico que poco a poco se fue convirtiendo en una experiencia espiritual. Toda una comunidad educativa giraba en torno a una persona pequeña, con muchas necesidades… pude apreciar la espiritualidad lasaliana en toda la comunidad educativa ( alumnos/as, profesorado, familias…) mediante miradas: de complicidad, de ayuda, de entrega; miradas hacía en el interior… En cada momento de oración de la comunidad educativa aparecía su nombre, su situación… incluso nos enseñó a valorar una palabra muchas veces tabú en nuestra sociedad, como es la palabra muerte. Ella falleció como consecuencia del trastorno de comportamiento que padecía.

2.- Cuando escuchas “espiritualidad lasaliana” ¿qué ventana se te abre?

Una ventana de oportunidad de servicio, ayuda a los más necesitados, donde a partir de ella emana la fraternidad, la fe, el acompañamiento… siempre en comunidad.

3.- Dinos qué sueles hacer para alimentar tu espiritualidad.

Visualizar directamente las necesidades de los más necesitados y, a partir de ahí, interiorizar -ordenar e intentar dar respuesta con acciones concretas: oración, diálogo con personas que Dios te pone en el camino…

Os cuento un secreto, cuando solo escucho cosas malas, agobios, tensiones… me voy rápidamente  a una pequeña aula de apoyo a la integración que hay en mi colegio, allí uno pasa a alimentarse de esos niños/as, que verdaderamente me enseñan lo que es la espiritualidad: risas, alegría, ayuda ante las dificultades y necesidades más diversas que podamos pensar…, después de ese ratito indeterminado en el tiempo, salgo alimentado de espiritualidad, veo a Dios en ellos.

4.- Si tu entorno lasaliano fuera “frío” en el tema de espiritualidad…. ¿cómo te las apañarías para abrir esa ventana?

Tenemos que obligarnos a buscar momentos de escucha, de pausa, de diálogo interno, …escuchar activamente al espíritu. En ocasiones nos distraemos en aspectos superfluos… por tanto, innecesarios. Lo importante es lo verdaderamente importante: todo no puede ser urgente, porque entonces podemos perder la esencia: la espiritualidad.

5.- Algún deseo o camino espiritual que te gustaría ver realizado en ti o en tu entorno lasaliano.

Últimamente se utiliza mucho la palabra acompañar, pero de una manera muy ligera, mi deseo es que el significado verdadero de acompañar (confianza- aceptación) sea una realidad entre todos los miembros de la comunidad  educativa, con el objetivo final de transformar la sociedad por medio de una propuesta de educación Cristiana.