Os ruego en nombre de Dios. Libro

Fundamenta su reflexión en documentos del Vaticano II, en sus propias encíclicas como Evangelii gaudium, Fratelli tutti, Laudato Si’ y Predicate Evangelium. Retoma escritos de pensadores como Camilleri, Dostoyevski, Dante Alighuieri… dirigiéndose tanto a los creyentes como a no creyentes.

Un nuevo libro que nos permite mantener viva la esperanza y se convierte, de alguna manera, en el inicio del camino que nos preparará el Jubileo de 2025: “Peregrinos de la esperanza”.

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Índice:

Introducción.

1. En nombre de Dios pido que se erradique en la Iglesia la cultura de los abusos.
2. En nombre de Dios pido que protejamos la casa común.
3. En nombre de Dios pido una comunicación que combata las fake news y evite los discursos de odio.
4. En nombre de Dios pido una política que trabaje por el bien común.
5. En nombre de Dios pido que se frene la locura de la guerra.
6. En nombre de Dios pido que se abran las puertas a los migrantes y refugiados.
7. En nombre de Dios pido que se promueva y anime la participación de las mujeres en la sociedad.
8. En nombre de Dios pido que se permita y fomente el crecimiento de los países pobres.
9. En nombre de Dios pido que se universalice el acceso a la salud.
10. En nombre de Dios pido que su nombre no sea utilizado para fomentar guerras.

Epílogo: Peregrinos de la esperanza.

Post scriptum.

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Citas que destaco:

“La cultura del cuidado es también evangelización” (Pág. 19)

“Acompañar y escuchar a las víctimas es la piedra fundamental sobre la que queremos construir una nueva cultura de prevención y combate de los abusos” (Pág. 21)

“Continuemos con la lucha contra la cultura de los abusos sexuales, de poder y de conciencia, que son verdadera cultura de muerte” (Pág. 27)

“Vivir en paz es también vivir en armonía con nuestra tierra” (Pág. 30)

“La Tierra nos precede y nos ha sido dada” (Pág. 32)

“Como Iglesia católica pienso que deberíamos dar un paso introduciendo en el Catecismo el pecado contra la ecología, el pecado ecológico contra la casa común, porque es un deber” (Pág. 35)

“La crisis es una sola, socioambiental, y estaremos mejor capacitados para resolverla si la abordamos de forma integral y no parcialmente, considerando de un lado sus aspectos sociales y de otro su vertiente ambiental” (Pág. 37)

“Con la responsabilidad que marca la gravedad de la situación, pero con la esperanza de que no todo está perdido” (Pág. 39)

“Todos estamos conminados a lograr una cultura que combata las denominadas fake news o noticias falsas, que evite los discursos de odio y que se desarrolle en un marco tecnológico que tutele a los más desprotegidos” (Pág. 42)

“En nombre de la protección de las diversidades, se termina muchas veces por borrar el sentido de cada identidad, con riesgo de acallar las posiciones que defienden una idea respetuosa y equilibrada de las diferentes sensibilidades” (Pág. 47)

“Estamos invitados a dar un paso hacia ese espacio virtual que, al igual que para el resto de la sociedad, nos resulta en parte desconocido y misterioso. Eso también es ser una Iglesia en salida: animarnos a adentrarnos mar abierto en el océano digital” (Pág. 51)

“Cualquier reflexión sobre la Política no puede obviar a su protagonista principal, que es el pueblo” (Pág. 55)

“Cada vez se hace más difícil encontrar intercambios de ideas con respeto” (Pág. 56)

“Allí donde falta el diálogo crece la división” (Pág. 58)

“El mirar a los ojos de la gente permitirá a los políticos y a los dirigentes en general establecer contactos genuinos con los más necesitados, que no queden reducidos al período electoral” (Pág. 61)

“A diferencia del pecado, es difícil que la corrupción tenga vuelta atrás” (Pág. 63)

“Así como en la Iglesia buscamos pastores con olor a oveja que caminen en medio de su rebaño, también la Política está sedienta de servidores que caminen en medio de lo popular” (Pág. 65)

“Pido a las autoridades políticas que pongan freno a las guerras en curso y que no manipulen la información o engañen a sus pueblos para la consecución de objetivos bélicos” (Pág. 68)

“La guerra nunca está justificada, porque jamás será una solución” (Pág. 69)

“Con la guerra hay millones que pierden todo, pero hay muchos que ganan millones” (Pág. 71)

“La existencia de las armas nucleares y atómicas pone en riesgo la continuidad de la vida humana sobre la Tierra” (Pág. 77)

“La multiplicación de las migraciones y la emergencia humanitaria que suponen las condiciones de desplazamiento de miles de hermanos y hermanas corren a diario el peligro de la invisibilización” (Pág. 80)

“Quiero invitarlos a hacerse eco de estos cuatro verbos: acoger, proteger, promover e integrar” (Pág. 81)

“Estamos a tiempo de construir un futuro enriquecido por la diversidad y las relaciones interculturales” (Pág. 84)

“Son miles de personas que lloran huyendo de guerras, de persecuciones y de violaciones de los derechos humanos, y de la inestabilidad política o social que hace imposible la vida en la propia patria o región” (Pág. 90)

“Creo que el concepto clave para poder empezar a debatir sobre el rol de las mujeres en la Iglesia es no caer en la trampa de confundir rol con cargo” (Pág. 94)

“Es necesario que todos tengamos la férrea determinación de decir basta a toda forma de violencia contra la mujer” (Pág. 96)

“Hay un invierno demográfico que asoma para muchas de nuestras sociedades, si no es que algunas están ya en él” (Pág. 99)

“Es importante que nos impliquemos todos en abrir espacios a las mujeres si queremos un futuro fecundo y creativo” (Pág. 103)

“Este sistema está enfermo porque, mientras el mundo es cada vez más rico, tras años y años en los que agredimos sin cesar a nuestra casa común, los pobres son cada vez más y son cada vez más pobres” (Pág. 106)

“Dios quiso que los bienes de la vida fueran para todos” (Pág. 11)

“Es sumamente cruel ver que, a pesar de que hay suficientes alimentos, no todos tengan acceso a ellos, o que existan regiones del mundo en las que la comida se desperdicia, se desecha, se consume en exceso o se dedica a otro fin que no es alimentar a las personas” (Pág. 117)

“El dinero debe servir en vez de gobernar” (Pág. 118)

“Existe una vida humana concebida, una vida adolescente, una vida que viene a la luz, una vida niña, una vida adolescente, una vida adulta, una vida envejecida y consumida, y existe la vida eterna” (Pág. 126)

“La universalización del acceso a la salud debe incluir también una óptica que deje a un lado las visiones que entienden al anciano como material de descarte” (Pág. 130)

“Una fraternidad auténtica se basa en la cultura del encuentro” (Pág. 135)

“El mundo de hoy, con tendencias fratricidas, nos pide certezas fraternas” (Pág. 137)

“Ninguna religión es inmune <al riesgo de las desviaciones fundamentalistas o extremistas en individuos o grupos” (Pág. 141)

“La violencia en nombre de Dios es una traición a la religión” (Pág. 143)

“La fraternidad es el camino” (Pág. 145)