“Dios ha dado a los niños maestros,
a quienes confía su cuidado,
en medio de cuantos peligros
se hallan en el mundo”

MR 197, 3

Son palabras de La Salle y, por lo tanto, escritas en un lenguaje que tiene más de 300 años, pero nos siguen hablando al corazón hoy.

Si estás leyendo este escrito, es porque eres EDUCADOR LASALIANO. ¿Te sientes así?
Igual te acabas de incorporar: estás invitado a serlo, estés en una escuela o en una obra socioeducativa.

“Dios ha dado a los niños maestros…”

  • Es una convicción de fe de La Salle. Ser educador lasaliano es una VOCACIÓN, una LLAMADA de corazón a corazón.
  • El educador, es decir, TÚ, estés donde estés, trabajes donde trabajes en este proyecto educativo, es/eres un REGALO para los niños y niñas. ¿Lo crees así? ¿Estás convencido de ello? La Salle te invita a ello.
  • Nuestra profesión, que puedes vivir como VOCACIÓN COMUNITARIA (buscando juntos el sentido de nuestra labor), es MUY ESENCIAL. ¿Lo crees así? ¿Lo cree la sociedad?

“Nos confía su cuidado…”

  • ¡Atención! Según La Salle, “nos confía su cuidado”, al servicio de las familias. Tenemos la misión de apoyar el crecimiento de nuestros niños y jóvenes en todas sus dimensiones y acompañarles a lo largo de toda su estancia entre nosotros.
  • Deja que resuene en tu interior la palabra “CUIDAR”. Y acepta el reto de cuidarte a ti mismo para cuidar mejor a los demás, en especial, a los más niños y niñas y jóvenes más vulnerables. ¡Es tan importante el cuidado!

…para que les guíen en medio de cuantos peligros se hallan en el mundo”

  • Vivimos en un mundo muy complejo y que se mueve a gran velocidad. Un mundo con grandes retos y con enormes desafíos. Nuestros niños/as y jóvenes siguen necesitando de personas que les guíen en este mundo enmarañado. Necesitan menos influencer y más REFERENTES. Personas de referencia que les aporten valores importantes, al estilo de Jesús de Nazaret.
  • La Salle insistió mucho en esto. No preparó profesores, sino maestros que fueran como hermanos/as mayores para los niños “confiados a su cargo”. ¿Te sientes parte de este proyecto?

Piensa en tus alumnos o en aquella personas con la que eres educador, sean jóvenes o adultas. ¿Cómo son? ¿Qué virtudes tienen? ¿Qué peligros les amenazan? La Salle te invita a ser GUÍA.