Aquí les presento un autor de música cristiana que puede ser muy interesante para trabajar la espiritualidad. De hecho, conocí sus canciones a través de un grupo de formación sobre acompañamiento espiritual, estábamos buscando material que ayudase en el acompañamiento espiritual, y las canciones de Santiago Benavides unen lo existencial y la mirada de fe, saben a Evangelio, a búsqueda de Dios, a encuentro con los sencillos y pobres. Es un joven cantautor colombiano.
Ya he utilizado una par de sus canciones para la oración comunitaria, aquí les presento 6 canciones. Van a encontrar una sencilla indicación para la oración comunitaria, el enlace al audio (alguna canción también tiene interesante el vídeo) y la transcripción de la letra.
Canción: «Sencilla».
Dinámica de la oración: Escuchamos la canción una primera vez (Hay que tener en cuenta que una de las estrofas está en portugués en la letra que está aquí transcrita está toda en castellano). Después podemos entregar o proyectar la letra escrita, e iniciamos unos minutos de interiorización. A continuación les invitamos a añadir alguna estrofa al canto, completando la frase: ‘Dame una fe sencilla para… en… como…». Compartimos nuestras estrofas en voz alta. Volvemos a escuchar la canción una segunda vez.
Dame una fe sencilla,
cómo risa de niños cuando juegan,
cómo gota de rocío que se rueda,
cómo cruz de rústica madera.
Dame una fe sencilla,
que se siente a la mesa de los pobres,
que se alegre de alegrar sus corazones.
Y que llore también con sus dolores.
Una fe así, parecida a ti.
Sencilla, como fue a la Tierra tu venida,
como fueron tus historias campesinas.
como fue tu hogar en Palestina.
Dame una fe sencilla,
para curar con esperanza la tristeza,
para cantar por el perdón en esta guerra,
para avivar el pábilo que humea.
Dame una fe sencilla,
que no le da espacio a la mentira,
que no logra acomodarse a la injusticia.
Y no calla lo que sabe que da vida.
Una fe así, parecida a ti.
Sencilla, como fue a la Tierra tu venida,
como fueron tus historias campesinas,
como fue tu hogar en Palestina.
Sencilla, como tu mirada compasiva,
como aquellas aldeas recorridas,
como el amor que te llevó a dar la vida.
Te invito a meditar en esta canción…
Y añadir, a modo de salmo personal,
una continuación, una frase a:
«Dame una fe sencilla…»
Canción: «De nada me vale».
Dinámica de la oración: Antes de escuchar la canción, preguntamos a cada participante ¿en qué crees que eres bueno? ¿cuáles son tus talentos? Dejamos unos minutos para reflexionar sobre ello.
Inmediatamente después escuchamos la canción (la letra está centrada en 1 Cor 13).
Podemos ahora entregar o proyectar la letra (es mejor que el grupo no tenga la letra antes de este momento). Invitamos a los participantes a orar con ella y, después, a compartir algún eco, algún sentimiento, alguna reflexión personal.
Si hablara palabras de parte de Dios y no tengo amor
de nada me vale, de nada me vale.
Si sé lo profundo de cada misterio
y no tengo amor,
de nada me vale,
de nada me vale.
(bis)
De nada me vale, de nada me vale
Sin amor la vida
es arar el aire.
De nada me vale, de nada me vale.
Sin amor las manos no ayudan a nadie.
Si tengo la fe que mueve montañas
y no tengo amor,
de nada me vale,
de nada me vale.
Si doy lo que tengo, incluso mi vida,
y no tengo amor,
de nada me vale,
de nada me vale.
De nada me vale, de nada me vale
Sin amor la vida
es arar el aire.
De nada me vale, de nada me vale.
Sin amor las manos no ayudan a nadie.
Canción: «Si no llenamos la Tierra».
Dinámica de la oración: Antes de escuchar la oración, avisamos que la letra está escrita hace unos 4 o 5 años, que luego les daremos o proyectaremos la letra y que no se preocupen si en alguna frase no reconocen al personaje nombrado.
Escuchamos la canción.
Podemos ahora entregar o proyectar la letra. Invitamos a los participantes a orar con ella en silencio y, después, a compartir algún eco, algún sentimiento, alguna reflexión personal. Por ejemplo: ¿Cómo podemos llenar nosotros la Tierra con la vida de Jesús?.
Si nosotros no anunciamos la esperanza,
será el líder de Nirvana el que ejemplo les dará.
Si nosotros no cantamos de pureza,
Daddy Yankee y Don Omar sus hazañas cantarán.
Si nosotros no les damos testimonio,
será Laura [programa de telebasura] en América a la que escucharán.
Si nosotros no exaltamos la modestia
será Silvio Berlusconi el que los inspirará.
Si no llenamos la Tierra con la vida de Jesús,
entonces la oscuridad se disfrazará de luz.
Si en nosotros no esta viva la inocencia,
Lady Gaga estará a cargo de la educación sexual.
Si nosotros no hablamos sabiduría,
de seguro Justin Bieber el filosofo será.
Si nosotros no vivimos diferente,
MTV seguirá siendo el modelo de virtud.
Y entre el Patrón del Mal y Factor X,
alimentarán los sueños que tendrá la juventud.
Si no llenamos la Tierra con la vida de Jesús,
entonces la oscuridad se disfrazará de luz
Si nosotros no escuchamos sus angustias,
ahí están los del zodiaco listos para aconsejar.
Y si ellos no bastarán, los profetas que se lucran
con palabras que acaban de inventar.
Si a nosotros no nos duele la injusticia,
será Batman el modelo del más justo proceder.
Si nosotros no sabemos a Evangelio,
buscarán sabor a cielo viendo porno en internet.
Si no llenamos la Tierra con la vida de Jesús,
entonces, la oscuridad se disfrazará de luz.
Si no llenamos la Tierra con la vida de Jesús,
entonces, la oscuridad se disfrazará,
y se esparcirá.
y pretenderá ser luz.
Canción: «Aprendimos».
Dinámica de la oración (similar a las anteriores canciones) ¿Cómo has aprendido? ¿Te reconoces que tampoco has sido buen alumno?
Aprendimos que todo es un camino,
que cambian los paisajes,
pero Él siempre está.
Aprendimos que no somos perfectos,
y, aún sin merecerlo,
nos vuelve a perdonar.
Aprendimos que tan sólo ofrecemos
nuestro propio quebranto,
rendido a su bondad.
Aprendimos, no por buenos alumnos
sino porque el Maestro,
paciente y tierno,
su amor nos da.
Aprendimos que sin Él
nada podemos hacer…
La, la, la…
Aprendimos que todo está en sus manos
y que nada se escapa
de su fidelidad.
Aprendimos no por buenos alumnos,
sino porque el Maestro
paciente y tierno
su amor nos da…
Aprendimos no por buenos alumnos,
sino porque el Maestro
paciente y tierno
su amor nos da…
Canción: «Concurso de semillas».
Dinámica de la oración: La canción parafrasea la parábola de la semilla de mostaza (Lc 13, 18-19). La música es muy alegre (a los niños les encantará), y la interpretación de la parábola tiene mucha carga de profundidad (ideal para adultos).
Una vez… un Concurso de Semillas.
Y ahí estaba la más chica viendo a todas desfilar.
Y le hacían esa broma medio tonta:
le decían que se pare.
¡Y parada estaba ya!
De seguro que pensó:
una pulga como yo
jamás será capaz de lograr nada importante,
¡qué de mala ser tan insignificante!
¡Cómo quisiera ser como pepa de aguacate.
Ella sí, siempre segura y elegante!
Y el jurado al mirar las concursantes
pasó a un lado de las grandes,
y se fue a su lugar.
Y le dijo: «Semillita, tú ganaste el concurso
para hallar la figura principal».
De una historia que va a ser
más famosa que Pelé.
Y así es como fue que
Semilla de Mostaza
se volvió toda una estrella literaria…
Jamás pensó que, al ser la semilla más enana,
iba a ser la representación más clara
de lo que Dios va a usar
para hacer las cosas grandes.
En su lógica divina inesperada,
ha escogido que las empresas sobrehumanas
las hará con semillitas de mostaza,
las hará con semillitas de mostaza.
Canción: «La mirada de Jesús».
Dinámica de la oración: Podemos empezar haciendo una referencia lasaliana a «mirar con los ojos de la fe». ¿Cuál es la manera de mirar de Dios? Es la manera de mirar de Jesús. Vamos a escuchar por primera vez la canción, de ritmo alegre, pero cuya última estrofa nos va a hacer rezar, y mucho. ¿Y compartir?
¿Cómo es la mirada de Jesús?
¿Cómo es la mirada de Jesús?
Para el que se siente estrella por el carro que maneja.
Imagínate cómo lo mira Jesús.
¿Cómo es la mirada de Jesús?
¿Cómo es la mirada de Jesús?
Para la que solo sueña cautivar por su silueta.
Imagínate cómo lo mira Jesús.
Si Él mira con el amor con que un padre mira a un hijo,
y mira viendo la historia que hay detrás…
Si Él mira con el perdón que costó su sacrificio…
Imagínate, cómo mira Jesús.
¿Cómo es la mirada de Jesús?
¿Cómo es la mirada de Jesús?
Para el loco de la calle con su frasco de pegante
Imagínate cómo lo mira Jesús.
¿Cómo es la mirada de Jesús?
¿Cómo es la mirada de Jesús?
Para el niño que era tierno y le dio por ser punketo.
Imagínate como lo mira Jesús.
Si Él mira con el amor con que un padre mira a un hijo,
y mira viendo la historia que hay detrás…
Si Él mira con el perdón que costó su sacrificio…
Imagínate… imagínate, imagínate cómo mira Jesús.
Y también para ti mismo en aquellos días fríos,
para aquel que es tu enemigo y así tengas mil motivos,
para aquel hombre malvado que fue un niño maltratado…
Imagínate como mira Jesús.
Si Él mira con el amor con que un padre mira a un hijo,
y mira viendo la historia que hay detrás…
Si Él mira con el perdón que costó su sacrificio…
Imagínate… imagínate, imagínate cómo mira Jesús.
Cuando haya quien te asuste, te incomode o te disguste,
cuando creas que alguien no merece amor,
Cuando sientas que encontraste a quien mirar con desprecio
Imagínate… imagínate, imagínate cómo mira Jesús.
Imagínate… imagínate, imagínate… para que así mires tú.