Autor: DÜRCKHEIM, Karlfried Graf

Título: HARA, Centro Vital del Hombre.

Editorial: Mensajero. Bilbao. 1992. 4ª Edición.

Páginas: 276

Breve comentario:

La primera parte del libro, cultura japonesa, está escrita para justificar el empleo del término Hara. Lo interesante comienza a partir del segundo capítulo. Como casi siempre en espiritualidad, no se trata sólo de entenderlo intelectualmente, sino de practicarlo. Y aquí viene la limitación occidental al no utilizar el cuerpo, la respiración, para conectar con nuestra interioridad. Creo que explica muy bien para qué la espiritualidad, por qué la necesitamos en nuestra vida. Además, el acceso a lo transcendente es un planteamiento actual,  inclusivo e interreligioso.
El texto es fácil de leer. Los textos del apéndice son prescindibles.

Índice:

1.- El Hara en la vida del japonés
– Preámbulo
– El Hara en la vida cotidiana de los Japoneses
– Hara, o sentido del ejercicio.
– Hara en la lengua japonesa.

2.- El Hara en su sentido humano universal
– Concepto del Hara en Oriente y Occiente.

a) El sentido general del centro del cuerpo
b) Sentido del vientre para el Europeo.
c) El Hara natural
d) Los dos niveles a los que se sitúa el Hara.

3.- Un medio amenazado:
– La «forma» del hombre en el Hara.
– El Yo y el centro vital (o Centro-Tierra)
– Formas defectuosas del Yo.

a) El Yo de habitáculo esclerosado.
b) El hombre cuyo Yo carece de habitáculo.
c) El origen de las formas defectuosas del Yo.

4.- El Hara como práctica en el camino.
– El simbolismo del cuerpo
– Hara: experencia vivida, toma de conciencia, y ejercicio.
– Silencio y condiciones previas a todo ejercicio.

a) Enraízamiento, vinculación a la tierra
b) Sentido y límites del ejercicio.
c) Condiciones de base de toda práctica.
d) Elementos fundamentales del ejercicio: postura, respiración, tensión…

– El ejercicio de la actitud (o postura) justa. El arte de estar asentado gracias al Hara.
– Contracción – Distensión – Tensión.
– El ejercicio de la respiración.

5.- El hombre que dispone de Hara.
– El Hara, fuerza existencial.
– Nuevas dimensiones.

Mirada retrospectiva y perspectivas.

Apéndice: Textos japoneses:
– Okada Torajiro
– Sao Tsuji
– Kanero Shoseki
– Hakuin Zenshi
– El arte del gato maravilloso.

 

 

Citas que resalto:

– «El verdadero sentido del Hara no es, sin embargo, el de dar al hombre un poderío sobre el mundo, sino el de permitirle que viva la presencia del SER sobrenatural». (Pág. 43)

– «En el desarrollo del hombre, es indispensable que éste tenga una fuerte conciencia del «Yo», y de un modo autónomo. Sin embargo, sería fatal para él quererse fijar en ese mundo e intentar instalarse en él definitivamente. (…)
En un Yo bien formado, el hombre es permeable a su Ser esencial: de éste le viene la confianza en sí mismo y el sentimiento de estar en condiciones de afrontar la vida. Tiene fe en un sentido superior y en un orden que está en la base de todo en la vida» (Pág. 87-88)

– «En la vida práctica, el hombre prisionero del Yo, se mueve por una necesidad angustiosa de certidumbres demostrables. Como le falta la confianza original den la vida que viene del SER, lo único que puede hacer es asegurarse en sus propias fuerzas. La confianza en sí mismo reposa únicamente en lo que puede, en lo que posee y en lo que sabe.» (Pág. 91)

– «El hombre cuyo YO no está delimitado, no consigue guardar su ‘integridad’ frente al mundo exterior. No sólo se entrega a él sin defensa, sino que ni incluso tiene un punto de apoyo para sí mismo. Depende por entero de sus pulsiones, de sus emociones, y no tiene ninguna libertad de decisión. En su versatilidad, en su comportamiento impulsivo, no hay ni constancia, ni línea de conducta. Así como el hombre con un Yo exageradamente desarrollado, vive en una seguridad ilusoria y en la conciencia de lo que él puede, el hombre cuyo Yo no ha sido apenas desarrollado, está siempre desbordado por los problemas que le plantea la existencia.» (Pág. 93)

– «Esta renovación es una metamorfosis, no sólo del ser espiritual, sino del hombre total, por lo que conlleva que éste modifique su relación con su cuerpo, y el modo de comprenderlo: él es y se transforma a través de su cuerpo.» (Pág. 106)

– » …el hombre debe volver a encontrar su nexo con la tierra. Ese es el sentido de la práctica del Hara.» (Pág. 107)

– » …la fuerza que confiere el Hara para hacer frente a la existencia, no supone sino un efecto secundario que se desprende del contacto profundo con las fuerzas originales de la Gran Vida.» (Pág. 108)

– «El sentido de la práctica del ‘Hara’ es favorecer un enraízamiento consciente en este centro, del cual puede surgir algo nuevo, permitir que esto se haga realidad, consolidarlo, dar testimonio.» (Pág. 119)